Para la cátedra de Historia
Hace unos quince mil millones de años según dicen los entendidos, un huevo incandescente estalló en medio de la nada y dio nacimiento a los cielos, a las estrellas y a los mundos.
Hace unos cuatro mil o cuatro mil quinientos millones de años, años más, años menos, la primera célula bebió el caldo del mar y le gustó y se duplicó para tener a quién convidar el trago.
Hace unos dos millones de años la mujer y el hombre, casi monos, se irguieron sobre sus patas y alzaron los brazos y se abrazaron y se entraron y por primera vez tuvieron el pánico y la alegría de verse cara a cara mientras estaban en eso.
Hace unos cuatrocientos cincuenta mil años la mujer y el hombre frotaron dos piedras y encendieron el primer fuego que los ayudó a defenderse del invierno.
Hace unos trescientos mil años la mujer y el hombre se dijeron las primeras palabras y creyeron que podían entenderse. Y en eso estamos... en eso estamos todavía, queriendo ser dos, muertos de miedo, muertos de frío, buscando palabras.
de Eduardo Galeano
Hace unos cuatro mil o cuatro mil quinientos millones de años, años más, años menos, la primera célula bebió el caldo del mar y le gustó y se duplicó para tener a quién convidar el trago.
Hace unos dos millones de años la mujer y el hombre, casi monos, se irguieron sobre sus patas y alzaron los brazos y se abrazaron y se entraron y por primera vez tuvieron el pánico y la alegría de verse cara a cara mientras estaban en eso.
Hace unos cuatrocientos cincuenta mil años la mujer y el hombre frotaron dos piedras y encendieron el primer fuego que los ayudó a defenderse del invierno.
Hace unos trescientos mil años la mujer y el hombre se dijeron las primeras palabras y creyeron que podían entenderse. Y en eso estamos... en eso estamos todavía, queriendo ser dos, muertos de miedo, muertos de frío, buscando palabras.
de Eduardo Galeano
0 comentarios